martes, 23 de abril de 2013

Los aeropuertos mas raros del mundo


Desafiar a la gravedad se vuelve en muchas ocasiones complicado. Sobre todo cuando las pistas se despegue y aterrizaje se construyen en lugares insólitos y al límite de las posibilidades entre la naturaleza y lo humano. Así, se producen situaciones en las que los aviones tienen que sobrevolar las cabezas de turistas en la playa, despegar desde un asfalto congelado o aterrizar en un aeropuerto al filo de un acantilado.

Te ofrecemos un conteo con los aeropuertos más extravagantes, raros e incluso peligrosos que existen sobre la faz de la Tierra.


1. Princess Juliana, Sint Maarten (Caribe)


A tan solo 25 metros sobre el suelo vuelan los aviones cuyo destino es el calor y el sol de Sint Maarten. Para poder aterrizar o despegar, han de pasar por una playa llena de turistas. Precisamente, aquí reside su atractivo. Y es que es, posiblemente, el único lugar del mundo donde se puede ver a los aviones (incluidos los de pasajeros de gran porte como el Boeing 747) cómo se aventuran o regresan de su destino justo debajo del mismo. Sin embargo, el gobierno local advierte que acercarse demasiado «puede provocar lesiones serias o incluso la muerte» al poder ser succionado por una turbina o ser enviado hacia el mar con gran fuerza. Aunque esto no evita que la playa se colapse de atónitos ojos y cámaras esperando a disparar el obturador.

El aeropuerto fue originalmente creado como pista de aterrizaje militar en 1942, pero fue reconvertido en uno civil tan solo un año más tarde. En 1964, el aeropuerto fue remodelado y se construyó una terminal nueva.


2. Juancho E. Yrausquin, Saba (Caribe)


Se podría pensar que un acantilado y una pista de aterrizaje no es la mezcla más sensata para la seguridad. Sin embargo para desafiar los imposibles como éste, está el aeropuerto de Saba, también en el Caribe. Está considerado como la pista comercialmente útil más corta del mundo, ya que apenas supera los 400 metros de longitud, cuando lo habitual es que sean de, al menos, 2,5 kilómetros. Cierto es que ningún avión comercial ni de pasajeros puede ir hasta allí, aunque sí los aviones más pequeños o los helicópteros. Por suerte, ningún incidente grave ha ocurrido hasta el momento.


3. Gibraltar


Que el tráfico se detenga, que un avión va a aterrizar en Gibraltar. Es lo que sucede cuando estos pájaros gigantes tienen que llegar o abandonar el territorio. Y es que la carretera más transitada del peñón cruza transversalmente el aeropuerto, cuya construcción data de la II Guerra Mundial, por lo que debe cerrarse cada vez que pasa un avión.


4. Funchal, Madeira (Portugal)


El peculiar diseño arquitectónico y su ingeniosa ingeniería es lo que más llama la atención de este aeropuerto. De lejos, podría tratarse de una maqueta, y los pilares sobre los que se apoya, simples palillos. Pero no. 180 pilares de hormigón lo elevan hasta 70 metros por encima del mar. Este aeropuerto internacional en la isla de Madeira es recordado por un trágico accidente en el que murieron 131 personas, el del vuelo 425 de TAP Air Portugal, que en 1977 se salió de la pista y planeó sobre el mar hasta estrellarse contra un puente y quedar partido en dos.

Eso sí, aterrizar en ella es mucho más complicado que en otra, debido a las turbulencias ocasionadas cuando la velocidad del viento es superior a 15 nudos. Por ello, los pilotos que despeguen o aterricen aquí necesitan una licencia especial.


5. Aeropuerto de Courchevel, en Francia


El lugar donde más se practica esquí, los alpes franceses, también es un sitio donde aterrizan aviones. Es el aeropuerto de Courchevel, con una pista de aterrizaje de apenas 525 metros y una pendiente del 18,5%. Tan solo pasan por aquí pilotos especializados o helicópteros privados. Eso sí, es protagonista de películas como «El mañana nunca muere», de la saga de James Bond.


6. Paro, Bután


El país donde se mide la Felicidad Interior Bruta de los Habitantes, Bután, sólo posee un aeropuerto: el de Paro. Solo hay ocho pilotos en el mundo certificados para aterrizar aquí, que entrenan con simuladores 3D de alta tecnología que recrean las condiciones de vuelo de este aeropuerto. Y es que está situado a más de dos mil metros de altitud y rodeado de picos y montañas puntiagudas que emergen a cinco mil metros del suelo.

miércoles, 10 de abril de 2013

Hard Rock Hotels, durmiendo al ritmo de la música

Solemos relacionar el nombre de Hard Rock con las míticas cafeterías dedicadas al mundo de la música en general y el rock en particular. Lugares en los que disfrutar de conciertos, hamburguesas y una buena cerveza contemplando artilugios varios relacionados con los grupos y cantantes más míticos de la historia. Tan famoso es este proyecto, emprendido en 1971, que hasta cuenta con su propia línea de souvenirs. Y desde hace algún tiempo, también con sus propios hoteles.

Se llaman Hard Rock Hotels & Casinos, y combinan la estética de la firma con el mundo de los alojamientos. La primera apuesta de Hard Rock por el mundo hotelero abrió sus puertas en Las Vegas en 1995. Desde entonces ha cosechado tanto éxito que ya cuenta con 16 hoteles operativos en todo el mundo.

Los encontraremos en lugares tan dispares como Hollywood, Chicago, Bali, Panamá, Penang (Malasia) o Punta Cana. En los meses venideros la empresa planea la apertura de otros 8 resorts, ubicados en Abu Dhabi, Hungría, Riviera Maya o Aruba, entre otros destinos. En definitiva, una idea que va viento en popa.

Son alojamientos de entre 250 y 670 habitaciones que ofrecen confort, diseño y música. Mucha música. Las estancias, desde las más baratas hasta las más caras, están decoradas con formas curvilíneas y colores llamativos. El negro y el rojo cobran un gran protagonismo, y nunca falta un cuadro, una alfombra o un objeto que haga referencia al mundo del rock. Desde imágenes de Jimmy Hendrix en acción hasta bafles, guitarras o baterías.

Los servicios de los hoteles Hard Rock incluyen restaurantes, cafeterías, spas, piscinas e incluso campos de golf. Algunos, no todos, también cuentan con su propio casino. Pero uno de sus mayores encantos es ser elección de las celebridades del mundo de la música, que en ocasiones se alojan en sus suites y ofrecen conciertos para los huéspedes.

Sin ir más lejos, el club The Joint, parte del Hard Rock Hotel & Casino de Las Vegas, es uno de los más prestigiosos de la ciudad. Por su escenario han pasado los Rolling Stones, Bob Dylan, Coldplay o Red Hot Chilli Peppers. Y recientemente ha actuado en el Hard Rock Hotel de Punta Cana el cantante puertorriqueño Don Omar.

Esta línea de hoteles es recomendable para amantes de la buena música, que suena a todas horas en los vestíbulos, restaurantes o piscinas. Sin embargo, también es una opción enfocada a los amantes de los resorts de oferta variada y completa. Aquellos de los que no es necesario salir para disfrutar de unas buenas vacaciones.